MI VIDA, TAL CUAL ERA

Hace aproximadamente unos días, puse punto y final a mi libro, mi historia, mi novela, a la que dedique ocho meses de mi vida, horas, días, noches...pero que hasta que no puse el punto y final no abandone. A pesar de las adversidades que me ocurrieron a lo largo de ese camino, no tire la toalla, y ahora me alegro. El simple echo de verla acabada, imprimida y encuadernada, para mi, que era todo un reto, es ahora la sensación que satisfactoria que he vivido en los últimos meses. Mi vida, ahora se encamina hacía la segunda parte de mi sueño, el que muchos lectores disfruten leyéndola, pero sigo siendo, esa chica normal, amiga de sus amigos, madre, esposa, hija, y hermana. ¿Un cambio? si, claro, el cambio de que ahora puedo decir que soy escritora, de que por fin mi duro trabajo, toco punto y aparte, porque los sueños nunca se abandona. Las ganas no me faltan, y eso es lo que me hace tirar hacia delante. Otro nuevo reto dentro de muy poco.